ALCALDES PERDIENDO EL AÑO

Hemos realizado, sobre el resultado de la última encuesta de Guarumo, una conversión de los porcentajes de aprobación de la gestión de los alcaldes a una escala de 1 a 5, similar a un sistema de calificaciones escolares. En esta escala, una aprobación del 100% equivale a un 5, mientras que porcentajes más bajos reflejan un desempeño proporcionalmente menor.

Este enfoque permite visualizar de manera clara y comparativa cómo la ciudadanía valora la gestión de cada alcalde, con puntajes que van desde la excelencia (cerca de 5) hasta el fracaso (cerca de 1).

Al observar los resultados de esta conversión en la tabla adjunta, dos casos se destacan por estar “perdiendo el año” al no alcanzar el umbral mínimo de 3.0, lo que indica un nivel insatisfactorio de aprobación por parte de la ciudadanía. Los alcaldes de Cali y Bogotá obtienen calificaciones de 2.74 y 2.49, respectivamente.

Visto de ésta manera, este resultado refleja una clara desconexión entre las expectativas de los ciudadanos y la gestión que estos están llevado a cabo. En el caso de Cali, Alejandro Eder apenas supera el umbral de 2.5, mientras que Carlos F. Galán en Bogotá se encuentra aún más rezagado, con una calificación cercana a 2.5, lo que sugiere un deterioro significativo.

Estas cifras son preocupantes, estar por debajo del 60% de aprobación que es lo mismo que tener una calificación de 3 en esta escala de evaluación, lo que indica es que existe una percepción general que en principio señala que se está fracasando en áreas clave de gestión.

Conclusión: teniendo como referencia el resultado de esta encuesta, los alcaldes Eder y Galán encaran el reto urgente, frente a los futuros resultados, de revertir una tendencia negativa si desean recuperar el apoyo ciudadano y mejorar su desempeño como gobernantes.